Sábado 15 de Diciembre de 2018

SANTUARIO DE FÁTIMA

Se consagró el altar y se dedicó su templo

El jueves 13 de diciembre se dedicó la iglesia solemnemente al culto divino y se consagró el altar del Santuario Diocesano Nuestra Señora de Fátima, el primero de toda la diócesis.

La celebración fue presidida por el Obispo diocesano, Mons. Ariel Torrado Mosconi y concelebrada por el párroco de la Iglesia catedral y rector del santuario, Padre Guillermo Gómez y por los padres Adolfo Petti y Ariel Palanga.

Cabe explicar que la dedicación de un templo y la consagración del altar es un rito que se realiza cuando finaliza su construcción o, como en este caso, cuando termina una etapa de remodelaciones.

Los ritos iniciales consistieron en ungir con agua bendita el altar, las paredes y a los fieles presentes, signo de purificación para su uso sagrado. Se inauguró el ambón (sitio desde donde se proclaman las lecturas bíblicas en las misas) y luego, el obispo, ungió el altar y las cuatro cruces con el Santo Crisma, lo que indica que un templo está especialmente dedicado al culto y la oración.

La ceremonia continuó con el rezo solemne de la plegaria de la dedicación y consagración y finalizó con la colocación de incienso y la iluminación del templo.

Seguidamente, continuó la misa como es habitual, donde en su homilía el  obispo explicó que el significado más profundo de esta celebración es que todo templo es un lugar especial de encuentro con Dios y en donde se proclama su Palabra. Asimismo recordó que todo santuario, debe tener abierta sus puertas a todo tipo de personas para que entren en comunión con Dios.  

El prelado subrayó que todo templo y, especialmente un santuario, debe tener abierta sus puertas -en el sentido más profundo de la expresión- para ayudar a las personas-que acuden allí con el peso de sus vidas e historias.  

Mons. Ariel continuó dando detalles del profundo significado del lugar desde donde se proclama la Palabra de Dios; del altar en el cual se ofrece el Sacrificio eucarístico; y del Templo todo como símbolo de la Iglesia, familia de Dios.

Cabe agregar que anoche, 13 de diciembre, coincidió también con el 10º aniversario de la consagración como obispo de Mons. Ariel. La misma la realizó el cardenal Jorge Bergoglio en la catedral metropolitana. Desde entonces ejerció su ministerio  en la diócesis de Santiago del Estero hasta 2015, fecha en que llegó a nuestra diócesis.

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