Martes 27 de Enero de 2015
Depende de la filial San Miguel de la Unión Asamblea de Dios, que tiene como conductor en nuestro medio al pastor Oscar Grosetti y se ubica en Avda. Mitre 2564.
Pastora Cristina Román.
Los pastores Enrique Sandoval, Cristina Román y Mónica y Oscar Grosetti.
En horas de la mañana del pasado domingo, en Avda. Mitre 2564, fue inaugurado una nueva sede del templo evangélico “Un paso de fe”, dependiente de la filial San Miguel de la Unión Asamblea de Dios, que tiene como conductor en nuestro medio al pastor Oscar Grosetti.
En la oportunidad, en diálogo con nuestro medio, la pastora Cristina Román puso de manifiesto que esta congregación “se encuentra desarrollando su tarea desde hace tiempo, y hemos podido abrir una puerta para aquellos que necesitan recibir una palabra de aliento proclamando a Jesucristo, sabiendo que el mismo tiene poder para sanar o sacar del flagelo de las drogas a aquellas personas que lo están padeciendo y que tienen en Jesús una puerta de salida y de escape de las adicciones”.
“Creemos que esta inauguración es una bendición para toda la comunidad de 9 de Julio, sea cual fuere su creencia, ya que nuestras puertas están abiertas para quienes lo necesitan y deben acercarse a Dios para dar soluciones a su vida con el aporte de toda la familia”, agregó.
Por su parte, el pastor Enrique Sandoval señaló que Jesús “llega a la comunidad con una propuesta diferente para tener un mayor alcance a todos los estratos sociales, en lo que hemos brindado nuestro apoyo y respaldo humano al pastor Grosetti”.
“Sabemos que 9 de Julio puede dar mucho más en cuanto a la actividad de la Iglesia”, subrayó.
Finalmente, el pastor Oscar Grosetti señaló que esta “es una verdadera satisfacción, después de 37 años de predicar la palabra de Dios, en tiempos donde hay tanta injusticia, tanta violencia y donde parece que todo se va corrompiendo y degradando, y en lo que debemos trabajar para revertir en una comunidad tan importante como la de 9 de Julio, con 50.000 habitantes, donde apenas 1.000 forman parte de las distintas congregaciones, lo que nos indica que todavía hay 49.000 almas que deben ser tocadas con un mensaje de salvación”.