Sábado 30 de Abril de 2016
Luego de 12 años de saludar a los trabajadores con alegría, y venturas de un futuro mejor, este año, lamentablemente, el mensaje es de acompañamiento.
Que sepan que cuentan con cada concejal, con cada diputado, con cada senador, con cada compañero militante para hacer lo posible, lo que esté a nuestro alcance para no seguir perdiendo derechos ganados en los 12 años peronistas, derechos que en tan poco tiempo estamos viendo perder.
Lamentamos cada uno de los despidos, nos duelen, sabemos que no es un 1ro de Mayo normal, que este año no se pelea por mejorar lo ganado, sino por no perder el trabajo o en el mejor de los casos no perder poder adquisitivo.
No es la primera vez que los argentinos, los bonaerenses, los nuevejulienses, nos encontramos en una situación tan adversa, donde la crisis provoca en muchos la desesperación.
Enfrente tenemos a los pocos que se están beneficiando (y mucho) a costas de los trabajadores, a los medios hegemónicos, al poder trasnacional que opera paralelamente en todo Latinoamérica fortaleciendo a gobiernos conservadores, cipayos; a sectores políticos que en su momento fueron a golpear las puertas de los cuarteles y hoy golpean la de banales programas televisivos.
Sectores que llegaron al poder sembrando el odio; el odio de pobres contra pobres, odio de quien estando un poco mejor se queja del que pudo cambiar el auto o irse de vacaciones. De quien no entiende que es un derecho de cada argentino tener acceso a la jubilación, las Netbook, asignación universal, trabajo digno y la casa propia.
Fue esa división entre pobres, o entre sectores medios, que hizo que “cambiemos” de rumbo político perjudicando a los trabajadores.
Hoy mientras la clase obrera no se reconcilie consigo misma, mientras no se entienda que un desocupado es un trabajador sin un derecho constitucional, mientras se crea que la culpa es del vecino que cobra mil pesos y no de los sectores que se quedan con millones en rentas extraordinarias, mientras todo eso ocurra, el poder seguirá en manos de quienes no piensan en la grandeza de la patria ni la felicidad del pueblo.
La lucha es despareja, tan despareja como lo era en aquel 17 de octubre de 1945 donde parecía que un hombre preso en la isla Martín García había perdido la batalla y seguirían gobernando los “BRADEN” de siempre.
Hoy como en aquel 17 de Octubre el mensaje a trasmitir es el mismo que nos legara aquel hombre ese día: “TRABAJADORES, SEAN HOY MAS UNIDOS QUE NUNCA.”
Bloque de Concejales Justicialistas.