Jueves 14 de Enero de 2021

Padres de nuestro medio crean un movimiento en pos del retorno de las clases presenciales

A través de las redes sociales, un grupo de padres nuevejulienses, quienes se manifiestan preocupados por la situación de la educación en la pandemia y reclaman la vuelta a la presencialidad, han visibilizado su reclamo y fomentan la creación de grupos similares en otras ciudades y provincias.

La consigna difundida a través de las siguientes cuentas, Facebook: @padresorganizados9dj - Instagram: @padresorganizados9 - Twitter: @9_padres manifiesta:

“Consideramos que la educación debe ser prioridad y con ello, solicitamos que se la declare esencial, como se ha hecho con tantas otras actividades. Cualquier actividad esencial puede realizarse con los debidos protocolos.

La educación es un derecho de nuestros hijos y la escuela es el lugar a donde debe darse. El vínculo, la contención, sociabilización, aprendizaje... todo se da en la escuela. Debe ser esencial y desde @padresorg y padresorganizados9dj, haremos todo a nuestro alcance, para que la clase política entienda, que con los chicos, NO”.

ENTREVISTA

La referente nacional de PADRES.ORG, María José Navajas, detalló el trabajo que vienen realizando en 16 provincias y las expectativas para este año que comienza.

¿Cómo surgió la iniciativa de Padres Organizados? ¿Cuál fue la respuesta de la gente?

La iniciativa en tanto “Padres Organizados” se planteó los primeros días de septiembre, pero la inquietud y las conversaciones sobre el tema ya habían comenzado al menos un mes antes entre quienes integramos el grupo inicial. Esas conversaciones se desarrollaron primero en Twitter y a partir de ahí decidimos elaborar una carta y buscar la adhesión de referentes de la opinión pública y especialistas en los temas de salud y educación. La respuesta de la gente fue en general muy buena, aunque una parte mostraba cierta desconfianza ante la iniciativa, la mayoría recibió la idea con entusiasmo. Pudimos constatar que la preocupación de madres y padres ante la falta de información concreta sobre los planes de vuelta a la presencialidad era tema de conversaciones privadas, pero todavía no se visibilizaba en la discusión pública.

Están confeccionado un trabajo muy detallado sobre esta problemática en todo el mundo. ¿Cómo organizan este trabajo?

El relevamiento de lo que estaba ocurriendo en diferentes países con respecto a la reapertura de las escuelas y los análisis de especialistas en la materia fue una de las primeras herramientas que usamos para elaborar nuestro reclamo. Esa información llegaba por diferentes vías, pero sobre todo a través de las redes sociales, de manera colaborativa. Una vez que pudimos armar nuestra página web, una de las integrantes del grupo, Victoria Baratta se ocupó de organizar esa información y catalogarla para que sirviese de herramienta a cualquiera que quisiera consultarla. Con el mismo propósito, subimos a la web un modelo de amparo (elaborado por Diego Hammerschlag, abogado y profesor de derecho constitucional) de acceso libre para aquellos grupos de padres que quisieran hacer una presentación ante la justicia.

¿Qué sienten ante la negativa de los sindicatos docentes de regresar a las clases? ¿Creen que los fundamentos de estos sectores son válidos o justifican la falta de clases?

La posición de una parte de los sindicatos docentes ha sido muy dura y rígida desde nuestra perspectiva. No compartimos su planteo con respecto a la exigencia de una vacunación masiva como variable decisiva para la vuelta a las aulas. Precisamente, la información que fuimos reuniendo durante estos meses, así como la opinión de distintos especialistas que asesoran al gobierno nacional va en un sentido contrario a esa postura. Por poner un ejemplo, la Dra. Angela Gentile, Jefa de Epidemiología del Hospital Gutiérrez, dijo claramente ya en el mes de septiembre que los niños debían volver a la escuela. Y el doctor Eduardo López, infectólogo, manifestó que la vacuna no es un requisito para la vuelta a clases porque ni los niños ni la mayoría de los docentes son grupo de riesgo.

Fuente: Revista Republicana.

 

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