Miércoles 16 de Abril de 2014
El secretario de Gobierno fue muy crítico respecto de la efectividad de la medida y opinó que “sólo con una política de Estado a nivel nacional pueden solucionarse este tipo de cuestiones”.
Luego de que el Gobierno bonaerense diera ayer un paso más en su intento por combatir a los “motochorros”, resolviendo finalmente obligar a los acompañantes a usar casco y chaleco reflectantes donde quede impreso el número de patente del vehículo, con lo que se busca atacar una modalidad delictiva utilizada en el 26% de los hurtos y robos callejeros, el secretario de Gobierno de la Municipalidad de 9 de Julio, Dr. Ignacio Palacios, opinó sobre el particular.
“Esta es una disposición del Gobierno Provincial, a través del Ministerio de Seguridad, y forma parte del paquete de medidas anunciadas por el Gobernador semanas atrás”, señaló el funcionario, indicando que la finalidad del sistema es la de “identificar a quienes circulan en motocicletas, evitando modalidades delictivas como la denominada motochorros”.
“Se está evaluando en estos momentos cómo se habrá de instrumentar y sumar a los controles que ya vienen efectuando tanto la Policía como la Dirección de Tránsito, y si bien es una medida nueva, en cierta forma confirma que en materia de seguridad se viene errando permanentemente, y atacando los problemas por atrás, y no a las causas que hacen a la inseguridad”, indicó, al evaluar que esta medida “si bien puede ayudar a la detección rápida de un delito, no apunta a dónde se debe para tener ciudadanos más seguros, que es realmente hacia dónde se deben dirigir los esfuerzos”.
“La inseguridad no sólo se ataca poniendo más policías en la calle, generando más cárceles o poniendo más patrulleros, sino que también se debe trabajar arduamente en la educación y la contención social, y si no ponemos estas dos cuestiones en el tapete de la discusión, todo este tipo de medidas pueden entregar una sensación de seguridad en el corto plazo, pero de ninguna manera atacar el problema real de la inseguridad, que debe entenderse como una política de Estado en todos los niveles”, opinó.
Palacios subrayó en el mismo sentido que debe comprenderse que “todos los esfuerzos que hace el municipio puedan alcanzar para solucionar los problemas de inseguridad, sin que se haga un esfuerzo conjunto en toda la provincia”.
“Sólo con una política de Estado a nivel nacional pueden solucionarse este tipo de cuestiones”, enfatizó especialmente.
Por otra parte, el titular de la cartera de Gobierno consideró que las medidas enmarcadas en esta “emergencia en seguridad” decretada por el Gobernador Scioli, “podrían haberse instrumentado en forma particular, sin incluirlas en un plano de emergencia, que aparece ante la ciudadanía como una puesta en escena política de muy corto plazo”.
“En definitiva estas medidas no son más que potestades que tiene el Poder Ejecutivo, como la compra de camionetas, la construcción de alcaidías o esta instancia del chaleco para los motociclistas o botones antipánico; lo que demuestra que se siguen instrumentando políticas erróneas en materia de seguridad y con cambios de rumbo constantes, como es el hecho de que el Ministerio de Seguridad y Justicia se haya desdoblado y además de subsecretarías y subsecretarías se hayan cambiado permanentemente funcionarios”, evaluó paralelamente, instando a todos los sectores políticos a “abrir un debate amplio sobre estas cuestiones de seguridad”.
Finalmente, el funcionario indicó que en estos momentos, el Intendente Municipal envió al ministerio de Seguridad una solicitud de información acerca de la prometida incorporación de nuevos móviles, tecnología y efectivos, “para que el anuncio político no queden solo para los distritos del Conurbano”.
