Viernes 26 de May de 2017

207º ANIVERSARIO DE LA REVOLUCIÓN DE MAYO

Se desarrollaron los actos oficiales

La Municipalidad de Nueve de Julio llevó adelante ayer, desde las 9,30 hs., los actos oficiales conmemorativos del 207º aniversario de la Revolución de Mayo.

Los mismos comenzaron con la recepción de autoridades, continuándose con un chocolate para los alumnos asistentes, el que se servirá en el hall de ingreso al Palacio Municipal.

A las 10,00 hs. tuvo lugar el Tedeum, en la Iglesia Catedral “Santo Domingo de Guzmán”, mientras que a las 10,30 hs. se dio inicio a los actos en Plaza Belgrano.

Allí, tras el ingreso de Banderas de Ceremonia y el izamiento de las distintas enseñas, se ofició una oración religiosa; y dejaron sus conceptos la Inspectora Jefe Distrital Lilina Vallabriga y el Intendente Municipal, Mariano Barroso

Posteriormente, se presentó el Coro de 6to año “B” Turno Tarde de la EEP Nº1 a cargo de David Maccagnani y tras la despedida de las Banderas de Ceremonia se dio finalización al acto.

PALABRAS DEL INTENDENTE BARROSO
“Hace 207 años un grupo de patriotas, encabezados por Cornelio Saavedra, decidía romper las cadenas de la dependencia con la corona española. La revolución no fue fácil, años de luchas, sacrificios, muertes y enfrentamientos fueron necesarios para conseguir al fin la libertad.

Lo que siguió fue aun más difícil; las diferencias internas generaron enfrentamientos entre hermanos y se tardó décadas  en conseguir la paz y el ansiado progreso.

Por eso hoy, quiero en primer lugar recordar a esos primeros patriotas, que arriesgaron su cabeza por la causa de la libertad: Cornelio Saavedra, Mariano Moreno, Manuel Belgrano, Bernardino Rivadavia y tantos otros. Fueron quienes desencadenaron los hechos que resultaron en una nueva Patria soberana e independiente.

El recuerdo de los grandes hombres históricos, es un ejercicio muy importante, ya que ellos son nuestro modelo a seguir, son el ideal en el cual debemos reflejarnos para tener siempre presente los laureles que supimos conseguir.

Sus principios, ideas, y ambiciones, son en general y básicamente los mismos que anhelamos en el presente.

Pero si bien es importante conocer la historia, la semana de mayo, las idas y vueltas en esos días, la plaza, el cabildo y todo lo que siguió; también es fundamental que no nos quedemos dormidos en los laureles, y sigamos trabajando todos los días por una sociedad mejor, con mayor calidad de vida para todos.

Hay una orden de San Martín a su ejército que quisiera compartir:

“Compañeros del ejército de los Andes: La guerra se la tenemos que hacer del modo que podamos: si no tenemos dinero, carne y un pedazo de tabaco no nos tiene que faltar: cuando se acaben los vestuarios, nos vestiremos con la bayetilla que nos trabajen nuestras mujeres, y sino andaremos en pelotas como nuestros paisanos los indios: seamos libres, y lo demás no importa nada... Compañeros, juremos no dejar las armas de la mano, hasta ver el país enteramente libre, o morir con ellas como hombres de coraje.”

Hoy no son los enemigos los realistas, los españoles; nuestro enemigo es el atraso, la desidia, el abandono. A ese enemigo no se lo combate con las armas, se lo combate con trabajo, con honestidad, siendo solidario, y desde la función gobernante que nos ocupa: con responsabilidad, haciendo obras, trabajando todos los días por un Nueve de Julio mejor.

Porque muchos años hemos pasado perdiendo la esperanza, aspirando a pequeños avances; hoy todavía con muchísimas dificultades aun por vencer y superar, tenemos la extraordinaria posibilidad de concretar montones de obras que hasta hace unos meses hubiesen sido impensadas; además tenemos una opinión general que recuperó la esperanza de que se puede vivir mejor, ese gran logro tenemos que acompañarlo, concretarlo, no podemos fallar, ésa es nuestra meta, que la esperanza se concrete al fin.

Que el espíritu de mayo fortalezca nuestra sociedad, que el trabajo de todos seguramente llevará el progreso a cada rincón de nuestro querido Nueve de Julio y nuestra querida Argentina.

Los invito entonces a seguir trabajando para mejorar todo lo que haga falta, con el objetivo pleno de generar trabajo; trayendo el progreso a una ciudad generosa, que se desarrolle junto a todas las localidades del interior; donde florezcan los disensos, las opiniones, las discusiones, pero también y por sobre todo los consensos, porque ésa es la base de la democracia.

Tal como dije en otras ocasiones, lo repito, seamos nobles hijos de esos padres de la patria que nos marcaron el camino, como hicieron nuestros abuelos inmigrantes que llegaron con una mano atrás y otra adelante dispuestos a trabajar en una tierra desconocida pero noble, que les daba una segunda oportunidad”.

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