Miércoles 30 de Noviembre de 2016
Yo entiendo y sé que en todo comercio hay empleados competentes y de los otros, hay encargados competentes y de los otros.
Por qué digo esto… Hace pocos días tuve un problema con una manguera de una máquina comprada al contado en un negocio grande de la ciudad. Nadie me daba una solución, ni siquiera tenían idea de dónde podía conseguir el repuesto.
Aclaro que yo no quería que me regalen nada estaba dispuesto a pagar el costo del repuesto, pero gracias a una empleada muy jovencita, pero muy responsable y muy competente, en menos tiempo de lo que pasamos discutiendo con los encargados, ella tomó el teléfono hizo una llamada y en quince minutos yo tenía el repuesto de la máquina. Como dice el dicho zapatero anda a los zapatos. En definitiva Sofía, una empleada con mayúsculas, fue la que solucionó mi problema.
Un vez más “Gracias” Sofía y Felicitaciones
Omar Figueiras.