Sábado 6 de Julio de 2013
La Sociedad Rural de 9 de Julio e INTA 9 de Julio desarrollaron el pasado jueves 4 a las 19,30hs. en el Salón "11 de Marzo" un encuentro de capacitación e información para productores, contratistas, ingenieros agrónomos, agronomías y público en general, enfocado en el manejo de productos fitosanitarios y la deriva en su aplicación.
El Ing. Pedro Daniel Leiva, de la Estación Experimental INTA Pergamino tuvo a su cargo dejar conceptos y evacuar consultas del público.
Leiva coordina en la Estación Experimental todo lo referido a las cuestiones de aplicación y manejo de "agroquímicos" y ha elaborado un informe técnico en el cual se plantean aspectos que colaboran para que los episodios de deriva sean atenuados.
En oportunidad de la charla, y en diálogo con los periodistas, el Ing. Luis Ventimiglia, de INTA 9 de Julio, remarcó que contar con este tipo de profesionales "con autoridad para aclarar sobre el uso de herbicidas y plaguicidas, traerá claridad y tranquilidad para los interesados".
"Son temas muy en boga que suelen manejarse sin un debido criterio científico", agregó el profesional de INTA.
Por su parte, el Ing. Leiva diferenció entre agroquímicos, "que son todos los productos químicos que se usan en el agro, los que son fundamentalmente fertilizantes y plaguicidas" y fitosanitarios, "que son más específicos".
"Hoy se presenta un conflicto entre la sociedad que no conoce sobre los temas del agro y el sector agropecuario respecto de la toxicidad e injerencia en el medio ambiente de este tipo de productos, que son utilizados masivamente, a razón 250 millones litros/kilos por año de plaguicidas, en una proporción de 11 litros por hectárea, lo que lleva a pensar en que existen malas prácticas sobre el particular; pero si pensamos en la población mundial que crece cada día y en una superficie que está estancada, no podemos no pensar en no utilizar los agroquímicos, ya que los mismos potencian la producción de alimentos para satisfacer las necesidades de alimentación de la población", expresó el especialista.
En el mismo sentido clarificó que el perímetro de prohibición de aeroaplicaciones que fija la nueva Ley provincial es de 2000 metros, mientras que para las aplicaciones terrestres es de 500 metros.
"Mi recomendación y la del INTA es que se puede producir dentro de la zona de exclusión con buenas prácticas, imitando los ejemplos de Estados Unidos y Europa, que fijan límites muy menores a los que se manejan hoy en día en la provincia de Buenos Aires, donde el tema es que faltan controles para observar el cumplimiento de las normativas vigentes", agregó.
Por su parte, el Ing. Juan Marsigliani, presidente del Círculo de Ingenieros Agrónomos de 9 de Julio fijó la importancia de "educar a los aplicadores y profesionales, a través de este tipo de encuentros y cursos para profesionales que nos permitan aunar criterios y cumplir con las leyes vigentes tanto a nivel provincial como municipal".
