Eduardo Medina regresó anoche a su querido French, luego del gran sacrificio y esfuerzo que lo llevó a cumplir un sueño en el tradicional Festival de Doma y Folklore de Jesús María.
Más allá del resultado, puntajes y del puesto conseguido, el domador frenchero trae orgullo en su pecho. Tuvo a todo un pueblo pendiente de la jineteada, más allá de los gustos y pensares.
Sus amigos y familiares esperaron al jinete, coronando todo lo vivido, siendo el afecto de todo un pueblo.
La participación de Eduardo se vivió con muchas expectativas no sólo de él y su familia sino de toda la gente del partido de 9 de Julio.
Eduardo tiene 29 años y comenzó a domar a los 16 en distintos eventos cerca de 9 de Julio y la zona. Hace dos años comenzó una nueva etapa saliendo a otros festivales.
Su primera presentación en Jesús María fue el jueves 5 de enero, entró en el ruedo haciendo realidad esa llegada que tanto anhelaba.