Lunes 5 de Enero de 2015
Néstor Márquez, jefe del cuerpo, se manifestó preocupado “por el mal uso y derroche que se hace del vital elemento, ya que algunos vecinos apenas cuentan con agua comienzan a llenar las piletas o regar la calle, sin advertir que estamos ante una emergencia y muchas viviendas no reciben agua de la red”.
El Jefe del Cuerpo Activo de Bomberos Voluntarios de 9 de Julio, Comandante General Néstor Márquez, brindó a nuestro medio amplios detalles respecto de la ardua tarea desarrollada a lo largo de los últimos días en el sector de Ciudad Nueva, concretamente en la intersección de calles Braille y Guido Spano, donde se encuentran uno de los tanques que proveen de agua a esta zona, y donde se procedió a la inyección de agua a la red, de acuerdo a lo convenido por el municipio, para evitar el faltante de presión en un importante número de domicilios, que llegarían a los 2.500.
“De acuerdo a la programación trazada oportunamente, trabajamos el pasado martes, el jueves 1ero. de 16 a 20 hs., el sábado y el domingo, para lo que hemos utilizado dos camiones regadores del municipio y uno de nuestros cisternas para verter agua al tanque mediante nuestras líneas de mangueras”, señaló el Jefe de Bomberos.
El servidor público se manifestó no obstante preocupado “por el mal uso y derroche que se hace del vital elemento, ya que algunos vecinos apenas cuentan con agua comienzan a llenar las piletas o regar la calle, sin advertir que estamos ante una emergencia y muchas viviendas no reciben agua de la red”.
“Seguramente el problema se habrá de acentuar si siguen aumentando las temperaturas, ya que el tanque se encontraba por la mitad en horas de la mañana y luego, por la tarde, totalmente vacío”, estimó Márquez, al apuntar que la tarea permite en un lapso de entre cuatro y cinco horas, inyectar unos 150 mil litros de agua, a lo que se agrega el trabajo de cada bomba, permitiendo lograr 300 mil litros en 5 horas, obteniéndose la misma de una bomba de gran porte que se encuentra en la playa de camiones.
LA TAREA DE LOS BOMBEROS
Respecto de las dificultades que esta tarea impone para los servidores públicos –que trabajan de forma rotativa a lo largo de turnos de 5 y 6 horas- y la previsión adoptada ante cualquier emergencia, Márquez indicó que de producirse cualquier tipo de emergencia o siniestro “inmediatamente se levanta el servicio de este sector”.
“Esto demanda un gran trabajo por parte de personal, con alto costo y personal totalmente voluntario; por lo que llamamos a la concientización de los vecinos en lo que refiere a la utilización responsable del agua”, agregó nuestro interlocutor.
