Brazo poderoso de Jesús ante ti vengo con la fe de mi alma a buscar tu consuelo en mi difícil situación.
No me desampares buen Jesús en las puerta que se han de abrir en mi camino, sea tu brazo poderoso el que me las abra y cierre según los designios, para darme la tranquilidad que tanto ansío.
(Aquí se piden tres cosas dificiles que se deseen obtener y se rezan 3 Padres Nuestros).
Dígnate señor recibir estas súplicas que te hace mi corazón afligido por los duros golpes que lo han vencido en la lucha humana.
Si Tú, Padre Divino, no intervienes en mi favor, sucumbiré por falta de ayuda.
Brazo poderoso de Jesús, ayúdame, ampárame y asísteme.
Concédeme la patria celestial.
A.N.