Sábado 23 de Noviembre de 2013
El especialista, integrante del staff de investigación de economía de Sociedad Rural Argentina, disertó en nuestra ciudad.
El economista Ezequiel de Freijo disertó en la Sociedad Rural.
El economista Ezequiel de Freijo disertó en la Sociedad Rural.
Como estaba previsto, a las 20 hs. del pasado jueves en el Salón “11 de Marzo” de la Sociedad Rural de 9 de Julio, y en el marco de una jornada de esclarecimiento a la comunidad sobre el nivel de impuestos que afronta el ciudadano, se desarrolló una interesante exposición del analista económico Ezequiel de Freijo, bajo el título “El debate pendiente: Un gran acuerdo para volver a crecer productivamente”.
El especialista es integrante del staff de investigación de economía de Sociedad Rural Argentina y ha sido convocado por Sociedad Rural de 9 de Julio y los Delegados de Sociedad Rural Argentina para 9 de Julio, Germán Mouremble y Ricardo De Bernardi.
De Freijo planteó a los asistentes cuánto le cuesta al ciudadano común los impuestos que recibe la producción y cómo pesan esos mismos impuestos en la vida diaria de los nuevejulienses, así como el significado de tanta carga de presión impositiva tanto nacional como provincial para 9 de Julio y cómo la misma afecta a los otros sectores de la economía local.
En diálogo con los medios de prensa, el disertante evaluó que actualmente “el campo está tributando el 58% más de impuestos que el resto de los sectores económicos, lo que significa que todo el campo recauda y genera 1,5 punto de recaudación por punto de economía y de riqueza generada”.
“Esto se ve muy acentuado en el plano agrícola, ya que un campo de esta zona tiene actualmente una presión tributaria de un 84% del resultado, lo que significa que se trabaja de enero a noviembre para pagar los impuestos y desde ese mes hasta fin de año para pagar sus cosas”, evaluó asimismo de Freijo.
El especialista consideró que esta carga “es muy fuerte” y, por ende, la producción agropecuaria “se encuentra estancada y desde el año 2007 a la fecha crece apenas 3%; cuando entre 2000 y 2007 lo hizo en un 40% y entre el 94 y el 2000 creció casi un 70%”.
“Asociado esto a las distorsiones comerciales que se han introducido en la cadena agrícola del maíz y el trigo, la lechería y la carne, ha generado también un fuerte desincentivo para los productores, siendo un ejemplo claro el del trigo, donde se tiene el área sembrada más baja de los últimos 111 años”, agregó nuestro interlocutor.
Ya en otro plano, analizó que de aquí en más debería trazarse un buen diagnóstico de cómo se ha expandido el gasto público, que pasó de 29 a 46% del Producto Bruto, “lo que ha generado el incremento de la presión tributaria y a su vez ha deteriorado la rentabilidad del productos; a lo que se agrega finalmente que el Gobierno tenga que recurrir a la maquinita para seguir financiando el gasto público creciente, generándose una situación inflacionaria que va desde el interior hacia las ciudades”.
Finalmente, respecto de las perspectivas para el año entrante, estimó que el calendario “será bastante complejo”, dado que “no va a haber una mayor cantidad de ofertas, acompañado esto de una mayor restricción de dólares; a lo que se suma que en el mediano plazo un contexto internacional también difícil”.