Viernes 19 de Noviembre de 2021
Los Bomberos debieron trabajar por más de 14 horas para controlar las llamas
El incendio de grandes proporciones que se manifestó en la tarde del miércoles, en la planta fabril de la empresa láctea Aurora, y que destruyó por completo dos naves que eran cámaras de frío y parte de la sala de producción, demandó un trabajo de más de 14 horas de parte de la totalidad del cuerpo de Bomberos Voluntarios de 9 de Julio, que se inició a las 17,15 del miércoles y continuó más allá de este lapso con las denominadas “Guardias de Cenizas”, contándose también con el apoyo de los cuarteles de Dudignac y Patricios.
“Se convocó a Bomberos Voluntarios de Dudignac y del Destacamento Patricios, que se sumaron a nuestras unidades, a excepción de una que quedó como guardia para protección de la ciudad”, informó Sergio Fernández, jefe del Cuerpo Activo, quien destacó la colaboración de los empleados de la firma para despejar las estructuras.
En cuanto al trabajo, detalló que “se fue circundando al fuego generando distintos frentes de ataque, con líneas de mangueras”, y remarco que a pesar de la magnitud del incendio “ha sido una suerte no contar con víctimas personales yno tener propiedades lindantes que se pongan en peligro”; a la vez que puso de manifiesto que al contar la fábrica con un acceso rápido y amplio “pudimos llegar con las distintas unidades bien cerca de la propiedad”
Acerca de dicho incendio apuntó además que no se recuerda un incendio de tan magnitud en la ciudad, siendo el último de estas características el edificio del Banco Nación, en 1972, cuando la sucursal se encontraba en la intersección de Av. Mitre y Libertad.
Finalmente, además, Fernández agradeció la colaboración del Municipio y Defensa Civil “que permanentemente facilitaron las cosas y que nos permitió poder trabajar sin contratiempos” y destacó el trabajo de la empresa para aplicar rápidamente sus protocolos de seguridad y evacuar a los empleados, cortar los suministros eléctricos y demás.
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