Viernes 2 de Octubre de 2015
El reconocido especialista en Deportología, coordinador del Laboratorio del Centro de Alto Rendimiento del Club Atlético Boca Juniors, consideró oportuno “generar convenios que permitan que hasta que los chicos sean más grandes puedan entrenar en su lugar”.
Como se anticipara en nuestra anterior edición, el Club y Biblioteca Agustín Alvarez llevó adelante en la noche del miércoles una interesante charla de nivel internacional referida a los métodos actuales en el control médico y la preparación física en el desarrollo del futbolista juvenil, a cargo de Rubén Argemi, reconocido especialista en Deportología, coordinador del Laboratorio del Centro de Alto Rendimiento del Club Atlético Boca Juniors, quien cautivó a un nutrido auditorio con su exposición.
En diálogo previo a su exposición con los medios de prensa, Argemi, indicó que su trabajo consiste “en la evaluación de los chicos, desde el fútbol infantil hasta el profesional, tanto en lo que hace a su salud, como al rendimiento deportivo y todo lo que hace al análisis de las lesiones y su alta”.
“La formación del jugador de fútbol abarca distintos aspectos, por lo que en el Club se trabaja con toda una estructura de profesionales que hace mucho hincapié en lo nutricional, en lo pedagógico y lo social, cuestión que se va dando en los distintos segmentos de edad y de las categorías preinfantiles, infantiles, juveniles y profesionales”, completó, remarcando que desde los 12 años “los chicos ya afrontan cuatro entrenamientos semanales más el partido”.
En este sentido, al ser consultado por uno de los temas más recurrentes que ha ganado las páginas futbolísticas, como es el alto nivel de violencia que se observa en el juego, el especialista opinó que el futbolista “alcanza altos niveles de rendimiento físico, y ese aumento de la velocidad y de la aceleración, lleva a que las colisiones sean de mayor intensidad”.
“Nosotros analizamos la prevalencia de lesiones a lo largo del tiempo, y la misma se mantiene constante y con los mismos niveles a otros países del mundo”, indicó el profesional, quien realiza este tipo de capacitaciones en distintos puntos del país.
En este sentido, consideró muy importante el trabajo a realizar en estas regiones, donde se hacen las detecciones de futuros jugadores, poniendo de manifiesto que “no llega el que quiere, sino el que puede; y por eso es fundamental apoyar a los chicos que cada vez más pequeños se van a Buenos Aires mediante convenios que permitan que hasta que los chicos sean más grandes puedan entrenar en su lugar”.
