Sábado 12 de Diciembre de 2015
El grupo de “Taller de Teatro de María Belén Bianco,presenta,hoy sabado12 y mañana domingo 13 de diciembre, en la sala del Teatro Rossini, a las 21,30 hs., el sainete de Alberto Vacarezza “El conventillo de la Paloma”.
En esta tercera y última entrega se aportan algunos datos sobre su autor.
Alberto Vacarezza, cuyo nombre real era Bartolomé Angel Venancio Vaccarezza, nació en Buenos Aires (Almagro), el 1 abril 1886 y falleció el 6 agosto 1959. Es el autor del sainete en nuestro país.
Fue compañero de colegio de Discépolo, con el que mantuvo una amistad que se prolongó en el tiempo. Una rara coincidencia es que ambos pusieron su mirada en las personas que vivían en inquilinatos y conventillos; viviendas muy humildes habitadas por personas de diferentes orígenes. Vacarezza observó sus costumbres, sus modos de vida, cómo se adaptaban al idioma y al contexto, cada uno con su particularidad de origen. En cambio Discépolo los estudió desde otro lugar; penetró en el alma de esa gente, indagó su psiquis y las plasmó en sus letras con ironía.
Don Alberto Vacarezza fue prolífero en letras de tango, estilos y ritmos afines que se cantaron mucho a partir de los años 20; Gardel le grabó 12 temas, despidió los restos del “Morocho del Abasto” en el Cementerio de la Chacarita.
Fue hombre de radio, guionista y poeta. Desarrolló una intensa actividad gremial desde ARGENTORES y la Casa del Teatro.
Antes de dedicarse al arte fue (a los 17 años) ayudante en un juzgado; su primera obra llevó ese título “El juzgado” donde plasma las observaciones que hiciera sobre sus compañeros de trabajo. Más tarde fue rematador de muebles, a los que llamaba de estilo “Luis catre” aludiendo, con su humorhabitual, a la baja calidad de los mismos.
En 1911, ganó un concurso en el Teatro Nacional de Pascual Carcavallo, que de inmediato se fijó en él; fue con “Los Scruchantes” (del lunfardo: ladrón que emplea la violencia con puertas o ventanas, muebles o caja fuertes).
Algunas de sus obras son: El Cabo Rivero (llevado al cine), Juancito de la Ribera (representada por la década del 60 por el cantor Jorge Vidal), Lo que le pasó a Reynoso (llevada al cine), Cuando un pobre se divierte, Murió el sargento (también llevada al cine) y fundamentalmente: Tu cuna fue un conventillo (llevada el cine) y el inusual éxito de El conventillo de La Paloma, que a partir de su estreno superó largamente las mil representaciones contínuas, pero en la milésima representación renunció la actriz que interpretaba a Doce Pesos, porque adujo entonces que su carrera debía buscar otros caminos. Y tuvo razón. Se trataba, nada más y nada menos, que de Libertad Lamarque.
Esta obra caracteriza, en cada personaje, como el tano, el turco y el gallego, a aquellos inmigrantes del siglo pasado que conformaron y representan nuestra argentinidad actual. A ellos se agregan personajes emblemáticos de la porteñidad, como el compadrito y los malevos (con su particular léxico lunfardo).
